El otro día, Clara, llamó a casa para ver a María, enterada de su buena noticia, quería compartir un rato de alegría y de paso regalarle uno de sus libros. Una buena y dulce vecina. Gracias.
El otro día, Clara, llamó a casa para ver a María, enterada de su buena noticia, quería compartir un rato de alegría y de paso regalarle uno de sus libros. Una buena y dulce vecina. Gracias.