Jon tenía cinco años cuando presentó a las clases de P5 de su colegio Monserrat de Barcelona, el cuadro que su padre le había hecho. Les explicó y enseñó los pinceles que usaba, los botes de mezcla de colores, el óleo, que los dejó oler. Fue un día para Jon muy bonito y un regalo para sus padres. La madre Almudena era la encargada de organizar estos talleres tan provechosos.